Es una novela que transcurre en un enclave imaginario donde una comunidad rural vive en pleno contacto con la naturaleza, por la flora y fauna que se describen en el libro pareciere que la historia transcurre en una zona cercana a la amazonía peruana. Si bien se describen animales, costumbres y leyendas de centro américa, en concreto del altiplano guatemalteco.
También se narran historias y leyendas del Valle del Jerte y de las Hurdes extremeñas como la del Macho Lanú, el jinete nocturno y la pantalla.
Es también un alegato en favor del cuidado de la naturaleza. El río donde viven los castores y las nutrias se seca debido a una pertinaz sequía que amenaza con acabar con la vida de los seres vivos que nadan en sus cada día más escasas aguas.
La contaminación de los humanos, la tala indiscriminada de los bosques de alrededor y el cambio climático son los causantes de los desmanes que asolan y exterminan la vida en el Valle de Oxapampa. Sus moradores se han dado cuenta de ello, pero parece ser que es demasiado tarde, ya nada se puede hacer para salvar la vida de los animales, del ecosistema y los alimentos comienzan agotarse, por lo que los pobres moradores del valle no tienen que comer.
Cuando parece que no hay salida para nadie la lluvia emana del cielo para regocijo de todos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario