La masacre en los cines de Aurora
La matanza de Aurora en 2012 tuvo lugar el
viernes 20 de julio de dicho año durante el estreno de la película The Dark Knight Rises en
el condado de Aurora (Colorado, Estados Unidos).
El ataque armado en se produjo en el cine
Century 16, el cual dejó doce muertos y otros cincuenta y nueve heridos. De los
fallecidos, diez murieron durante el tiroteo y dos mientras eran atendidos en
hospitales. Con un total de setenta y una víctimas, es el mayor tiroteo masivo en la
historia perpetrado por un sólo sujeto.
El agresor, de 24 años James Eagan Holmes, nació el 13 de diciembre de 1987 y era estudiante
en la Escuela de Medicina de la Universidad de Colorado, aunque había abandonado los
estudios en junio de 2012. Holmes fue inmediatamente detenido tras la
masacre.
Los heridos fueron atendidos en
varios hospitales, incluyendo un hospital improvisado en la escena del ataque.
Testigos no lesionados fueron trasladados a la Gateway High School para
sesiones informativas.
El ataque ocurrió en el Cine 9 al
lado del Centro de la Ciudad en Aurora. Se informó que el tirador entró al cine
a través de una puerta de emergencia alrededor de media hora después de
iniciada la película, usando una máscara antigás y un chaleco antibalas.
Había
muchas jóvenes disfrazados de los personajes de la cinta, hecho que ayudó a que
pasara desapercibido. Él, iba vestido de negro, con guantes y una
máscara, como el terrorista Bane , antagonista de Batman.
James esperó una de las escenas en
acción de la película para iniciar disparos a diestra y siniestra, con una
mueca de felicidad y la adrenalina por las nubes Holmes mecía su metralleta de
un lado a otro tratando de alcanzar a todos los espectadores la mayoría trataba
de refugiarse bajo los asientos y eso fue lo que evitó sus muertes. Gracias a las
butacas pudieron resguardar sus cabezas y la mayoría sólo recibió disparos en
las piernas.
El público en un primer momento confundido
por el sonido de la proyección, no intuyó que algunas detonaciones provenían
de la sala donde se encontraban. Cuando escucharon los alaridos de las
personas que se encontraban en las filas delanteras voltearon la cabeza y fue
entonces cuando comprendieron que había un desequilibrado mental vestido de
super héroe disparando con una metralleta.
Holmes
iba disparando fila por fila como si fuera un fumigador lanzaba balazos por
cada pasillo de asientos tratando de alcanzar a todos los espectadores para que
no hubiera supervivientes que pudieran dar la voz de alarma a la policía y
evitar así su actuación en las otras doce salas existentes en aquel centro
comercial.
James fue bajando hasta llegar a la
fila más cercana a la pantalla. Una vez allí disparó a la pantalla creando un
estruendo estremecedor mientras las chispas salían de la pantalla gigante al
mismo ritmo que la sangre de las víctimas se derramaba por el patio de butacas.
Holmes apuntó a los proyeccionistas
que por fortuna habían salido huyendo y por tanto no fueron alcanzados por las
balas. Fue entonces cuando el asesino trató de salir de la estancia para
continuar la matanza en la sala adyacente. Por fortuna uno de los espectadores
había logrado salir y cerró la puerta para evitar que continuase la balacera.
Holmes aprovechó ese momento para recargar su metralleta mientras pedía a voz
en grito que le abrieran la puerta.
Los heridos pudieron escuchar los
gritos amenazantes de Holmes pidiendo que le abrieran la puerta. Fueron minutos
de mucha tensión dónde rezaban para que el asesino abandonase la sala y no
tratase de rematar a sus víctimas, algunas de ellas ya muertas y otras heridas
y muertas de miedo por una posible réplica de disparos de metralleta.
James consiguió abrir la puerta tras varias
patadas y entró en la sala contigua. Se llevó una terrible decepción al
observar que se encontraba vacía. Los espectadores habían salido por la puerta
trasera unos segundos antes.
Las demás salas estaban igualmente
vacías. James comenzó entonces a disparar a las personas que corrían en el
parkin contiguo al pasillo dónde se encontraba. Una enorme cristalera era lo
único que separaba la zona de estacionamiento del lugar en el que disparaba con
la misma , personas y asfalto sembrando el caos y la confusión.
Cuando se quedó sin munición Holmes
escuchó el ruido de las sirenas de los autos de la policía, al instante
percibió la petición de salir manos en alto que por megáfono un agente le
solicitaba.
En ese momento Holmes hubiera deseado
tener más balas para salir al estacionamiento y continuar disparando contra las
patrullas de policías con la misma intensidad que empleó en el cine. Pero eso
ya no era posible. Sólo le quedaba la opción de entregarse o la opción de salir
huyendo.
James optó por la segunda opción y
salió corriendo por las escaleras hasta el tejado de los cines. Allí aguantó
todo el tiempo que pudo hasta que un helicóptero le encontró y comenzó a
recibir disparos desde las alturas.
Fue entonces cuando decidió claudicar
y tras bajar las escaleras se entregó a la policía a escasos metros del lugar
dónde había estacionado su auto unas horas antes.
El jefe de la
policía de Aurora dijo en una conferencia de prensa que el sospechoso utilizó
dos dispositivos para distraer a los miembros de la audiencia, que
"encendió un cigarro o algo" en el cine, antes de usar un fusil
semiautomático AR-15, una escopeta Remington calibre 12, y una pistola calibre 40 para
disparar contra la multitud del cine. También se le encontró una segunda pistola Glock en el auto
Hyundai blanco detrás del cine.
De acuerdo a las
fuentes del FBI, el pistolero aparentemente abrió una puerta de emergencia en
la parte trasera del cine, para ir a su coche para alistarse, y así poder
entrar fácilmente al cine para comenzar su ataque. La mayor parte de la
audiencia no encontraron al francotirador como una amenaza cuando entraron al
cine, pensaban que era un friki que iba disfrazado.
El artículo
periodístico decía lo siguiente acerca de la matanza:
“El asesino vestía
un disfraz, pero también otros se habían disfrazado para la película y pensaron
que el pistolero estaba haciendo una broma, hasta que lanzó granadas de gas y
comenzó a disparar sus armas. Otros presentes pensaron que los disparos era una
parte de los efectos especiales de la película.”
“Alrededor de
"la primera escena con armas", Holmes que para entonces iba
enmascarado tiró una granada de humo, que oscureció parcialmente la vista del
público. El pistolero sacó un fusil y abrió fuego contra el público, y se
detuvo solo para recargar su arma. Primero le disparó a la parte posterior de
la sala, y luego apuntó hacia la gente que estaba tratando de escapar por los
pasillos. Algunas balas penetraron la pared del cine e hirieron a personas
en la sala número 8, donde se estaba proyectando la misma película. Tras salir,
un miembro de la audiencia vio al tirador ir hacia la salida y le bloqueó el
paso al sostener la puerta de emergencia cerrada mientras el atacante golpeaba
el otro lado de la puerta. “
Las llamadas de emergencia se
hicieron a las 12:39 a.m., y la policía llegó menos de noventa segundos
después, casi inmediatamente para aprehender al sospechoso al entrar a la
escena. Los investigadores creen que el tirador actuó por su cuenta y las
acciones no eran parte de un ataque de una organización terrorista. La policía
luego entrevistó a doscientos testigos para entender cómo se llevó a cabo el
ataque.
En total murieron doce personas; diez
murieron en la escena y otras dos fueron declaradas muertas en los hospitales
locales. Los informes iniciales dijeron que cincuenta o cincuenta y tres
personas fueron heridas. Los números fueron posteriormente actualizados a
setenta y una personas tiroteadas, con doce muertos y cincuenta y nueve
heridos. La poca precisión de Holmes evitó una tragedia mayor, el número de
víctimas heridas lo hace el tiroteo más grande en la historia de los Estados
Unidos. Sin embargo no lo es si se
atiende solo al número de víctimas mortales, pues casi todos recibieron balazos
en extremidades sin perder la vida.
Los heridos fueron tratados en
Children's Hospital, Denver Health Medical Center, Medical Center of Aurora,
Parker Adventist Hospital, Rose Medical Center, Swedish Hospital, y University
Hospital, como también un hospital improvisado establecido en la escena del
ataque. Los testigos no lesionados fueron transportados a la Escuela Gateway
para presentar sus informes. Las edades de las víctimas iban desde 3 meses a 51
años. Un niño de tres meses de edad fue dado de alta después de ser tratado al
hospital por sufrir una caída sin consecuencias graves.
La primera víctima mortal
identificada fue Jessica Ghawi, una periodista deportiva de 24 años de edad que
fue identificada por poseer un bolígrafo con su nombre. Esta mujer parecía
estar destinada a morir en una balacera.
Había previamente sobrevivido al
tiroteo en Toronto Eaton Centre el 3 de junio de 2012. Nada podía
hacerle pensar que unos meses después se iba a ver envuelta en otro tiroteo,
esta no vez nada pudo hacer para salvar su vida. Las balas de Holmes le
alcanzaron órganos vitales que le ocasionaron la muerte instantánea. También se
confirmó que un marinero y dos aviadores de la Armada de los Estados Unidos y la Fuerza
Áerea, estuvieron en el escenario del tiroteo. Los dos pilotos corrieron mejor
suerte que el marinero y tan sólo resultaron heridos.
La víctima más joven fue una niña de
seis años de edad, atendida en el Children's Hospital Colorado quien falleció
producto de las heridas de bala.
El 22 de julio, el presidente Barack Obama viajó a
Colorado para reunirse con las víctimas de la masacre. La visita fue para
reunirse brevemente con las autoridades locales y reconfortar a los familiares
de las víctimas, entre ellos más de medio centenar de heridos. Pero
desafortunadamente la matanza no fue lo suficientemente grave como para que
entrara a debate la ilegalización de las armas.
El comisionado del Departamento de Policía de Nueva York, Ray Kelly, afirmó
en una rueda de prensa que James Holmes, de 24 años, le dijo que era El
Joker.26 «Sí,
efectivamente, se identificó como El Joker, obviamente el enemigo
de Batman».
Se ha pretendido relacionar el
comportamiento airado y agresivo en este tipo de individuos con la temática
violenta de cierto tipo de películas. «Así como la gente imagina cosas sexuales
luego de ver una película sexual, otras personas pueden tener ideas agresivas
luego de ver una película violenta» Sin embargo, millones de personas ven este
tipo de cintas y es ínfimo el porcentaje que reacciona de tal manera tras
visionar este tipo de películas. La solución pasa por una mayor seguridad y
control en la venta de armas consideró Ray Kelly.
]
El lunes 23 de julio de 2012, se hizo el juicio
contra Holmes, el estudiante que asesinó a 12 personas y dejó 59
heridos. Con el pelo pintado de anaranjado y una expresión de perplejidad,
asistió ante la justicia para escuchar sus cargos.
James Holmes llevaba
uniforme naranja y su mirada variaba entre la inexpresión, la perplejidad y la
tristeza, durante la audiencia ante un juez del Condado de Araphoe,
al que pertenece la localidad de Aurora, el suburbio de Denver donde ocurrió la
masacre en la medianoche del viernes James no hizo comentario alguno.
Era imposible determinar si el
comportamiento de Holmes era resultado del estrés, de
medicamentos, de desequilibrio o, tal vez, parte de una actuación. La audiencia
duró menos de 10 minutos, y tuvo entre el público a varios familiares de las
víctimas. Holmes compareció nuevamente ante la corte el lunes (30 de julio de 2012) para escuchar
formalmente los cargos y fue puesto bajo custodia sin derecho a fianza.
Ante la contundencia de las pruebas
incriminatorias contra James Holmes los abogados defensores no tenían más
opción que pedir una declaración de no culpabilidad por problemas mentales.
El 30 de julio de 2012, Holmes fue
acusado de 142 cargos. Entre las acusaciones hubo 116 por intento de asesinato,
uno por posesión ilegal de explosivos y un cargo agravado por crimen violento.
Holmes pasó toda la
semana (hasta que llegó su audiencia) por un túnel bajo tierra que conecta la
corte con la prisión del condado de Arapahoe.
Los fiscales pidieron entre la semana
lunes 23 de julio a domingo 29 de julio la Pena de muerte. El procedimiento
para conseguir su ejecución es un procedimiento muy complicado suele ser muy
largo, ya que requiere la presencia de los testigos en todas las audiencias, lo
cual puede ser psicológicamente devastador para estas personas. Tres años más
tarde de la brutal matanza Holmes continua en la prisión sin saber si
finalmente será ejecutado o si por el contrario pasará el resto de sus vidas
cumpliendo cadena perpetua.
Si bien en un primer momento la
policía señaló que no había dudas sobre la responsabilidad de Holmes,
quien se entregó afuera del local todavía vestido con un traje antibalas, la
fiscal afirmó que el caso no estaba necesariamente asegurado. "Aún
hay que investigar una enorme cantidad de evidencia y nunca debemos presumir
que será un juego de niños".
Esas palabras parecieron ser escuchadas
por James quien con ayuda de sus abogados cambió el hilo argumental de su
defensa y comenzó a sostener que había sido drogado por los asesinos y obligado
a declararse como el culpable de la matanza.
Sostuvo que le adormecieron con
opiáceos minutos antes de la matanza y que posteriormente llenaron su auto de
material armamentístico y le sacaron del mismo mediante amenazas de muerte si
no se declaraba culpable. Los supuestos asesinos huyeron del lugar en moto un
minuto antes de que James se entregase a la policía.
Esta rocambolesca historia fue
rápidamente desmentida por la policía pues en el lugar de los hechos hay varias
cámaras y en ninguna de ellas se pudo apreciar a un sujeto siendo sacado de su
vehículo por la fuerza. Hecho que se une a las declaraciones de los testigos
que afirmaron que solamente había un pistolero en los cines.
El presunto agresor,James Eagan Holmes, fue detenido por
la policía en la escena del crimen junto a su auto en el estacionamiento del
cine con sus armas, y no se resistió cuando fue arrestado.
Una vez aprehendido, contó a las
autoridades que guardaba explosivos en su residencia en el norte de Aurora. De
acuerdo a la policía, Holmes les dijo que tenía una trampa de explosivos en su
apartamento antes de ir al cine; como resultado, la policía evacuó cinco
edificios cercanos. Los agentes quedaron estupefactos al comprobar con
horror la cantidad de material explosivo
existente en su vivienda. "Se veían muy sofisticados para pensar que los
había diseñado él sólo” indicó uno de los policías que realizó el registro. El
complejo de apartamentos en donde residía Holmes estaba limitado a los
estudiantes del Centro Médico de la Universidad de Colorado, pacientes, y
miembros del personal.
James había dejado de estudiar e
invirtió todo su tiempo en fabricar bombas artesanales e incendiarias
artesanales con las que daba rienda suelta a sus macabros deseos de sembrar el
caos y el miedo. Apuró sus últimos días en la residencia para terminar de
fabricar sus últimas bombas. La noche anterior a la matanza recibió una carta
en la que se le daban 48 horas para abandonar la residencia por haber dejado de
ser estudiante. Este hecho adelantó los acontecimientos, pues James tenía
pensado actuar una semana más tarde.
Los agentes de FBI y oficiales de
policía usaron una escalera para subir al apartamento de Holmes, donde
instalaron una cámara en el extremo de una vara de 12 pies y descubrieron que
el lugar tenía una trampa explosiva. Las autoridades evacuaron cinco edificios
ya que intentaban descubrir cómo desarmar los materiales explosivos y despejar
el área para evitar una detonación que produjese más muertes.
Holmes fue criado en una familia
judía en San Diego, California. Se graduó de San Diego, de la Escuela Secundaria Westview en
2006 y obtuvo una licenciatura en neurociencia de la Universidad de California en
Riverside en 2010.
Holmes tuvo dificultad al encontrar
un trabajo después de obtener su licenciatura. Luego, intentó obtener un
doctorado en neurociencia de la Escuela de Medicina de la Universidad de Colorado en Aurora,
pero lo dejó en junio de 2012, unos meses antes de la tragedia porque se sentía
frustrado con las escasas posibilidades de conseguir un trabajo de su
especialidad médica.
Sus compañeros describieron a Holmes
como una persona agradable y un estudiante "muy inteligente" que no
mostraba signos de violencia. También fue descrito como una persona
introvertida y tímida, y fuertemente involucrado en su iglesia local.
El distribuidor de la película
de Warner Bros. dijo que estaba profundamente entristecido por el tiroteo, y
anunció que cancelaría el estreno en París de The
Dark Knight Rises para evitar que algún perturbado mental pudiera repetir
lo acaecido en Colorado. La campaña de marketing para la película fue
suspendida en Finlandia y Alemania, dos países dónde se han producido varios episodios de
jóvenes cometiendo matanzas similares a las de James Holmes.
«Las palabras no pueden expresar el
horror que siento», aseguró Christian Bale en un
comunicado. «No puedo empezar a entender de verdad el dolor y la pena de las
víctimas y sus seres amados, pero mi corazón está con ellos», concluyó.
Además Christian Bale visitó a los heridos.
James Holmes
continúa confinado en una celda solitaria del condado de Arapahoe. Cuando
modificó su declaración declarándose no culpable fue trasladado a una corte
contigua para que asistir a una audiencia donde le tomaron de nuevo declaración
ante los abogados de ambas partes. Holmes continúa con un defensor público.
Las autoridades del
recinto médico Anschutz de la Universidad de Colorado averiguaron si Holmes
había utilizado su posición en un programa educativo para conseguir materiales
peligrosos, pero los funcionarios escolares se limitaron a decir que el
sospechoso era un estudiante muy dedicado y que no les entraba en la cabeza
como un estudiante tan aplicado podía haber cometido un crimen así.
Holmes comenzó a comprar armas en tiendas de
la zona de Denver desde el preciso momento en que dejó de asistir al doctorado.
Dos meses antes de la tragedia se sintió sin ganas de continuar con sus
estudios y decidió dar un giro de 180 grados a su rutinaria y patética vida de
estudiante sin futuro.
La Universidad
de Colorado cooperó con la Policía, pero en una de las pocas declaraciones que hizo
sobre el caso se limitó a decir que Holmes no explicó los motivos para
retirarse en junio de su programa de doctorado. En la universidad no le
conocían bien ni profesores ni estudiantes. James se hacía pasar por una
persona afable y segura de sí misma pero en verdad era inseguro y se mostraba
pesimista con su futuro profesional. Ese fue el verdadero detonante de su
actuación, más allá que desde su adscripción al club de los Legionarios de
Belcebú le incitaran a cometer tal masacre con insistencia.
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